31 julio 2011

Baches en el camino

Cuando aprendes el Método de entrenamiento para ir al baño puedes trasladarlo a cualquier situación en la que te encuentres, vacaciones, visitas, salidas pero siempre encontraras baches en tu camino que debes de pasar pero seguir. Después de que mi hija estaba habituada a la nica me aventure a sentarla directamente a la tasa del baño. Lo que pude adaptar a mi vida fue sentarme yo en la tasa y en medio de mis piernas ponía a mi hija, ella sentía seguridad al recargar su espalda en mi pecho. Eso fue muy bueno porque a cada lugar a donde iba podía meterme al baño sentarme y sobre de mi a mi hija.

Un día estábamos en unas vacaciones y fuimos al baño del restaurate cuando me vieron entrar al baño los ojos de otra mujeres sorprendidas por meterme al baño con una bebé, me decían si quieres la detengo y yo no confesaba que realmente la que iba al baño era ella. Un día me pillaron en el "asunto" una mujer abrió el baño y me vio ahí con mi hija las dos sentadas. Me dijo que haces muy sorprendida, con calma le explique el método y después de ver los resultados en la tasa del baño me dijo. Debes publicarlo. Yo quede anonadada me dijo eres la primera mamá que veo que hace estas cosas. Le dije yo no invente el método ya hay libros.
Parecía que esta mujer estaba tan entusiasmada que quería llevarme a un programa de televisión. Yo le comente a mi esposo y me dijo ni lo pienses y yo pensándolo bien me dije que no quería los reflectores sobre mi.  Dios ha sido el que nos ha guiado a aplicar este método con mucha constancia incluso con todos los baches en el camino. 

El día que corrí a llevar a mi hija al baño en una boda y la senté sobre de mi, y según yo levante mi falda.
El resultado fue ver todo lo que queda en el pañal después de comer una rica papilla sobre mi vestido de fiesta decidí  modificar la forma de sentarla y llevar a donde iba mi asiento portátil . Además mi hija ya tenia la fortaleza en la espalda para sentarse en el asiento del baño y  mantenerse erguida sin respaldo. Así que tenía un asiento en la casa fijo y uno para salir que era realmente muy cómodo.

Seguimos por muchos meses y había consistentes victorias, días y días sin cambiar un pañal con popo y muchos aciertos en que mi hija hiciera pipí en el baño aunque el pañal también estuviera mojado.Pero también existieron momentos donde el entrenamiento parecía no funcionar. Tratábamos de no desalentarnos y volver a los principios básicos del método otra vez. No importando si en un segundo ya la había llevado al baño y al ponerle el pañal limpio se hacia en el. Pensamos que fueron momentos donde de cierta manera mi hija ejercía su voluntad respecto al entrenamiento simplemente "no quería" así que esperábamos pacientes y solo reforzabamos el entrenamiento cuando teníamos oportunidad. Recurríamos a estar muy tranquilos para que por si solo el entrenamiento tomará su paso.

Después de que mi hija cumplió un año su voluntad era mas fuerte así que agradezco haber empezado desde Bebé porque no cabe duda que la voluntad del pequeño influye en el entrenamiento a veces están más dispuestos a cooperar y a veces simplemente no quieren así que lidiar con eso es un bache más. Solo queda esperar y motivar. Empezamos a motivar con estampas de estrella en una tabla que pegamos en el baño y premios eso fue tomar otra vez el control. Al año 4 meses mi hija estaba en casa y no usaba pañal. Empezamos con calzoncitos entrenadores y cada paso se daba muy progresivo.

Los baches en el camino son temporales, después el camino vuelve a ponerse plano. En casa es donde mas se puede experimentar así que cuando estábamos en casa intensificabamos el entrenamiento.

Mi hija tuvo un compañero para ir al baño que era un perrito de peluche o un libro para mantenerla sentada, esas dos herramientas fueron muy útiles para nosotros.


Motiva y da incentivos en tu entrenamiento pero no desistas, pronto tomara su paso de nuevo.

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